INGREDIENTES:
Un kilo de espalda de ciervo, 100 gramos de
manteca, 12 cebollitas, dos vasos de vino tinto, dos tacitas
de caldo, un diente de ajo, una cucharada de harina, sal,
pimienta, perejil y tornillo.
PARA El ADOBO Tras mechar la carne con tocino, se le pone un
litro de aceite, vino blanco, medio vaso de vinagre, dos
cebollas picadas, clavos, una hoja de laurel, una cabeza de
ajos, tornillo, chalotas, una zanahoria o ruedas, sal y pimienta en grano,
PREPARACIÓN:
Se corta a pedazos la espalda del ciervo y se deja reposar
en el adobe.
Hecho esto, se deslíe en una cacerola la manteca y se echan
los trozos de ciervo, dejando que se doren y apartándolos a
continuación para echar en la grasa la harina que se deja dorar,
removiendo sin parar y mojándola con el vino y el caldo.
Se
sazona con sal y pimienta, se añade el perejil, el tomillo, el
laurel y el diente de ajo picado.
Se deja que dé un hervor y se vuelve a echar la carne y el
tocino en la cacerola. Se tapa ésta y se deja que vaya hirviendo
a fuego moderado por espacio de dos horas.
Una hora antes de
servir, se agrega una docena de cebollitas doradas en manteca.
Para servir se echa el contenido de la cacerola en una fuente
honda, desengrasando la salsa y quitando las hierbas. Si el
ciervo es joven, basta que está en él dos días, pero en caso
contrario es preferible que esté cuatro.