INGREDIENTES:
3 cebollas, medio vaso de caldo, medio de vino blanco, uno de salsa bechamel, sal, pimienta y mantequilla.
PREPARACIÓN:
Se cuecen con un poco de mantequilla, cuidando que no se doren, las cebollas cortadas a rodajas, a las que se añade
el caldo, el vino y la salsa bechamel, dejando que todo junto hierva lentamente unos quince minutos.
Se sazona adecuadamente y se revuelve con suavidad la salsa con el fin que resulte muy fina.
Al servirla, se le agregan un pedacito de mantequilla fresca, del tamaño de una nuez.