Cuatro lubinas de unos 200 g cada
una, media docena de filetes de anchoa,
una latita de salsa concentrada de tomate, una cebolla pequeña, 100
g de aceitunas negras, un manojo de perejil, una ramita de estragón, un vaso de aceite de oliva, sal y pimienta.
PREPARACIÓN:
Se escaman y vacían las lubinas, se lavan bien, se colocan
en un plato, se salpimentan y se riegan
con aceite de oliva, dejándolas marinar durante una hora.
Se pone la parrilla al fuego y cuando está al rojo vivo se asan encima las lubinas, una cada
vez, haciéndolas cocer primero a fuego
vivo y luego a fuego más flojo durante unos diez minutos.
En una cazuela se sofríe la cebolla muy picada con tres cucharadas de aceite de oliva; luego se
añade la salsa de tomate disuelta en un
cucharón de agua; se salpimenta y se hace espesar a fuego medio.
Después se añaden el perejil y el estragón picados y a
continuación las lubinas, dándoles la vuelta un par de veces a fin de que se impregnen bien del
jugo.
Se reparten por encima
las anchoas y las aceitunas muy picadas y se deja cocer durante unos diez minutos, dando la vuelta a
las lubinas una sola vez con la ayuda de
una pala.