Cuatro tournedos del solomillo de buey, tres cucharadas de aceite
de oliva, una nuez de mantequilla, 50 g de seta secas, medio vaso
de coñac o brandy de Jerez, una
cucharadita de salsa de tomate, un cucharón de caldo, 50 g de mortadela y pimienta.
PREPARACIÓN:
En el aceite y en la mantequilla se doran los turnemos, bien
atados con un hilo grueso e incoloro, se salpimentan y se guardan en lugar
caliente.
En el jugo de los tournedos se ponen las setas, reblandecidas
previamente en agua tibia y finamente picadas.
Se deja que tomen sabor durante algunos minutos y luego se
rocían con el coñac o brandy de Jerez, caliente y flameado.
Apenas el licor se haya evaporado, se añade la salsa de
tomate diluida en un cucharón de caldo; se salpimenta ligeramente y se deja
reducir el jugo hasta casi la mitad; a continuación, se vuelven a poner en la
cazuela los tournedós, se deja que se calienten durante un ratito y se sirven
en una fuente rociados con su propio jugo y colocando encima de cada uno una
cucharada de aceitunas negras picadas muy finamente.